Mereces a quien se muera por verte, las ganas se le transparentan y los minutos cuenta. Mereces a quien te dedica hechos, no palabras. Mereces a quien le vuelvas loco despeinada, con la cara lavada y pantalón de chandal además de con ese vestido negro preciosamente maquillada. Mereces a quién considere tu sonrisa su casa, y su hogar tu mirada. Mereces a quien te ofrece chocolate en esos días que tienes, así, sin preguntar más nada. Mereces a quien le gusta oirte cantar, aunque sea desafinada; a quien te saca a bailar sin música, en cualquier calle transitada. Mereces a quien te deja notas, en las puertas pegadas. Mereces a quien recuerda tus lunares, tan estratégicamente puestos que pudiera dibujarlos como sí un mapa de constelaciones se tratara. Mereces a quien conoce tus cicatrices, tus defectos y también manías y a pesar de tanta imperfección, le fascinas. Mereces a quien cuando a su lado caminas , orgulloso como un pavo real sus plumas vistosas hablan y te aprieta la mano, haciéndote sentir protegida. Mereces a quien te admira, por esos pequeños pasos que das en la vida. Mereces a quien celebra tus logros y te besa en la frente en tus pequeñas derrotas. Mereces a quien no te ignora, te elige en todo momento y te dedica su tiempo. Mereces a quien te ofrece su jersey en una noche fría, al que te habla mirándote, al que te seca las lágrimas con sonrisas. Mereces a quien te da besos de buenos días, caricias de buenas noches y abrazos en la cocina. Mereces a ese que te coge desprevenida, que te alza en volandas y te contagia su risa. Mereces a quien te espera, a la salida del trabajo quizás con una cerveza, pipas o gominolas de fresa, o sin nada, pero quiere darte una sorpresa. Mereces a quien completas, a quien con sólo mirarte tiemblas. Mereces a quien te come los miedos, a quien no le asusten los precipicios, pues te estará agarrando tan fuerte, que si cae, cae contigo...

HORIZONTE

corre, sigue corriendo, no mires atrás, esfuérzate, esfuérzate hasta que tu mente te diga que ahí esta tu limite,

Compañías

Hay momentos, en la vida, en los que, es mejor vaciar la mente, no pensar en nada, y disfrutar, de una buena comida, una puesta de sol, una charla con esas personas con las que compartimos nuestras vivencias y pensamientos, que están ahí, que forman parte de ti. Momentos de relajación donde todo lo demás no importe y solo importe ese instante, ese instante de felicidad fácil de conseguir,  aprobecha los momentos que puedas pasar con ellos,  disfruta,  y vive como si cada día fuese el último,  algún día acertaras.

G.

@ginyvr

El lugar

Hay cosas,  lugares,  que simplemente estan allí, y nosotros no nos paramos a mirarlos, conviven con nosotros, a veces toda nuestra vida,  como por ejemplo un enchufe que siempre estubo allí,  y hace dos días que conozco de su existencia,  o algunos paisajes que nos parecen normales,  y de repente un día te paras a mirar y te sorprende su belleza,  como esta calle,  que recorrí cientos de veces,  y hace unos días me cautivó con un juego de colores que plasmó el sol a través de las nubes sobre los árboles, los bancos,  yo.

G.

@ginyvr

El Narciso.

Esta flor recibe su nombre, de una leyenda, que habla de que un hombre muy apuesto, estaba cautivado, de su propia belleza, y un día, se vio reflejado en un estanque, y se quedo un tiempo mirándose, aunque tubo un traspiés y callo al agua, no consiguió salir, y se ahogo. 

Por eso, la flor del narciso, crece cerca de zonas donde hay abundante humedad, o cerca de estanques y lagos.

G.

@ginyvr

EDELWEISS, UNA FLOR DE LEYENDA.

A esta flor, que es la flor nacional de suiza se la considera un símbolo de valor y coraje. La leyenda más extendida es que los hombres para demostrar que estaban enamorados tenían que subir a las montañas a buscar una y entregársela a su amada, recordar que lo más normal es que estuvieran a unos 2.000 metros de altura.

También se cuenta que tomó su color de la luna y que es capaz de huir de los esfuerzos de los hombres que la persiguen. Esta flor representa el amor eterno y su nombre significa "nobleza blanca".

@ginyvr

Los Sueños Olvidados.

Qué triste pensar en aquellas cosas que se llevó el tiempo, aquellas cosas  que el viento arrastró hasta el olvido, que acumulan polvo en una esquina del desván.  Ésos viejos juguetes olvidados,  la ropa de tiempos pasados, el peluche que abrazábamos cuando teníamos miedo en aquellos tiempos, en los que la magia todavía  existía. Quizás sigan ahí varios años más, sin que nadie se moleste, ni siquiera en apartar ese camión de juguete que yace sobre una triste muñeca,  a la cual el tiempo, le arrebato ese brillo dorado que tintaba su pelo y se convirtió en esa escarcha que rodea lo antiguo, lo obsoleto, lo olvidado.

G. 

@ginyvr